18 mayo 2021

Deliciosas recetas con mermelada de naranja

MERMELADA DE NARANJA Y QUESO AZUL MERMELADA DE NARANJA Y QUESO AZUL

Para tomar a media mañana o media tarde, como postre, en zumo... La naranja es uno de los cítricos más consumidos en todo el mundo, no solo por su sabor, sino por las numerosas propiedades y beneficios que aporta para nuestra salud. De hecho, la naranja es una de las reinas de la vitamina C y una enorme fuente de antioxidantes. Tomar naranjas en el día a día es una opción más que recomendable para mantener a punto nuestro organismo.

La naranja es, además, una fruta polivalente. A lo largo de su temporada (generalmente, de octubre a junio), además de ser degustada de forma tradicional, también puede convertirse en mermelada. La mermelada de naranja tiene algunas particularidades, eso sí, ya que a diferencia de otras mermeladas de frutas, su sabor no es tan dulce, e incluso puede tener un punto ligeramente amargo.

Se podría llegar a considerar que las recetas con mermelada pertenecen al terreno del desayuno, pero nada más lejos de la realidad: una buena mermelada de naranja puede estar presente en numerosos momentos del día. Lo que marcará la diferencia, eso sí, será que sea una mermelada artesanal, realizada con las mejores materias primas y elaborada con cariño y mimo para dar lugar a un producto de excelente calidad.

Te damos a continuación algunas ideas para que puedas disfrutar de una buena mermelada casera de naranja a lo largo de una jornada. Toma nota, puesto que te ofrecemos varias opciones para introducir esta fruta tan nutritiva en tu día a día de forma original, variada y, sobre todo, ¡sabrosa!

Desayuno: Croissant con mermelada

Hay días en los que lo dulce es lo que más tira. En esos momentos, una pieza de bollería puede robarnos el corazón y convertirse en el más apetitoso manjar para desayunar. La mermelada de naranja marida a la perfección con este tipo de productos y, si utilizamos un croissant, podremos degustar en un solo bocado lo mejor de ambos elementos.

¿Cómo hacerlo? Terriblemente fácil. Solo tenemos que abrir el croissant por la mitad, intentando, eso sí, no llegar a separarlo en dos partes, e introducir dentro la mermelada artesanal de naranja al gusto. Podemos hacer que la mermelada tenga más protagonismo o menos dependiendo de lo glotones que nos hayamos despertado ese día. Lo acompañamos con un café, un té o una infusión y… voilà! Un desayuno irresistible.

Comida: Tostas de queso azul con mermelada

Queso y mermelada: combinación ganadora. Si separados son riquísimos, juntos son, sencillamente, insuperables. Cada queso tiene, a su vez, mermeladas que le pueden acompañar con especial acierto; los quesos cremosos, a menudo, pueden ir acompañados de sabores más potentes (el Camembert con arándanos suele arrasar en esta categoría); mientras que los quesos fuertes suelen apostar por mermeladas más sutiles para rebajar el sabor.

Pero, ¿cómo combinar la mermelada casera de naranja con un queso? La propuesta es, ni más ni menos, que con queso azul, todo un imprescindible para los amantes de este tipo de producto aunque, eso sí, con una potencia de sabor indiscutible. Para ello, no tenemos más que coger una tosta y untar un poco de queso azul. A continuación, le añadimos la mermelada de naranja por encima, componiendo así un picoteo tan original como divertido. Fácil, rápido y sencillo, es una forma de disfrutar de la naranja como nunca antes habrías pensado.

Merienda: Gofre con mermelada

Aunque los gofres proceden originariamente de Bélgica, hace ya algún tiempo que son habituales en nuestro territorio. Hoy en día, se pueden tomar con muchísimos productos e incluso también son utilizados junto con alimentos salados en lugar de dulces.

Algunas de las recetas con mermelada de naranja que podemos hacer es valernos de los gofres para componer una merienda de primera. Evidentemente, los gofres se pueden comprar, pero siempre resultarán más deliciosos si los hacemos de forma artesanal, aunque para ello nos hará falta una gofrera. Para hacer la masa, necesitaremos los componentes clásicos de cualquier postre: leche, huevo, mantequilla, esencia de vainilla, harina, levadura… El toque especial lo dará la mermelada de naranja y, la coronación definitiva, los frutos rojos, que podremos añadir para redondear el resultado.

Cena: Bacalao a la naranja

El bacalao es uno de los pescados que más gusta por su textura, sabor y versatilidad en la cocina. Además, hacer una receta con bacalao es apta para prácticamente todos los públicos (el nivel de complejidad no es demasiado elevado), y eso permite que sea una opción sencilla y ágil a la hora de plantearse una cena. Combinado con mermelada de naranja estará simplemente excepcional.


 Te contamos cómo:

Lo primero que tenemos que hacer es precalentar el horno a 180 grados unos 10 minutos.

Sacamos la bandeja del horno y colocamos los lomos de bacalao fresco, con la piel hacia abajo, en dicha bandeja.

Salpimentamos al gusto y regamos con aceite virgen extra.

Horneamos unos 20 minutos a la misma temperatura, a 180 grados, aunque el tiempo dependerá de lo gruesos que sean los lomos y de la potencia de cada horno concretamente.

Tendremos que ir echando un vistazo de vez en cuando para asegurarnos de que todo está en orden.

Una vez tenemos el bacalao, lo sacamos, lo ponemos en un plato, y servimos acompañado de la mermelada de naranja, unas fresas, y un poco de ensalada. Sano y delicioso, ¿qué más se puede pedir?

Extra, un postre: helado con mermelada de naranja

¿Se pueden hacer postres con mermelada? Claro que sí. Además, podemos añadir la mermelada artesanal de naranja a algún helado que tengamos en casa (preferiblemente, de un sabor suave), o hacer por nuestra cuenta el helado. Las dos opciones son perfectamente válidas y deliciosas. Una propuesta interesante puede ser combinar el helado de chufa de València con una deliciosa mermelada de naranja por encima. Dos sabores muy de la terreta que, juntos, son imbatibles (especialmente ahora que se acerca el verano).

Con estas recetas, ya tienes ideas suficientes para seguir utilizando esta fruta tan rica sin ninguna excusa. La mermelada de naranja nunca había sido tan versátil.

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